Colores en tus pupilas

Antes y después.
Me pregunto para que, si total el tiempo no existe.
Todo se fusiona, todos volvemos a encontrarnos.
Parece que el mundo cada día es más pequeño.
Recuerdo aun, que en algún “tiempo” solía ver únicamente el color negro.
La oscuridad y la sombra lo eran todo.
Sin embargo, los años pasaron y me enseñaron que también existían matices.
Matices grises, algunos más claros, otros más oscuros.
Simplemente tonos, un tanto monótonos, que no desvariaban demasiado.
Pero en realidad, en lo más profundo de mi esencia, siempre tuve presente
Que había millones de colores por descubrir.
Colores opacos, brillantes, colores ¡Infinitos colores!

No hace mucho comencé a conocer algunos.
Y no podría a esta altura poner en palabra, la cantidad de matices que encontré
Por todas partes y en cada partícula viva de este planeta, y de otros también.

Pero hoy, hoy me desperté y sentí el sol brillar dentro mío.
Abrí mis ojos con una sensación, bastante particular que no sentía hacia demasiado tiempo quizás.
Cuando me levante y me acerque a la ventana, note que estaba nublado.
El sol no había salido. Y no saldría en todo el día.
Entonces comprendí
Que ese brillo que abrigaba mi corazón
Era el brillo de tus ojos.
De tus ojos, en el recuerdo de mis pupilas.
De tus ojos color miel, profundos y mágicos.
De tus ojos preocupados, dudosos y a veces, tristes.

¿Cuántos colores más me quedaran por develar?

N.P.S
13/08/06

No hay comentarios:

Publicar un comentario