20 años no son nada

En este momento estoy cumpliendo veinte años en la tierra, al menos en esta encarnación. Mis papas duermen, así que estoy sola con mi perro que esta durmiendo arriba de la mecedora y que cada tanto me mira de reojo. Sin embargo, estoy feliz. Creo que empece esta nueva década con mucha luz, con mucho conocimiento nuevo, con mucha sabiduría y con un alma especial que me acompaña en cada paso de este despertar tan profundo que esta empezando en mí y fluye de adentro para afuera de mí ser. Es algo inexplicable, indescriptible con palabras, y creo que las únicas personas que lograran entenderme realmente son aquellas que lo hayan vivido. Realmente siento en el alma que mi vida cambio en menos de un mes. Cambiaron mis pensamientos, por lo cual estoy tratando de cambiar mis acciones, cambiaron mis actitudes, mis maneras de percibir, ver, oler y hasta “tocar” el mundo en el que vivo. Esta transformación interior que estoy viviendo, me di cuenta hoy, que la estoy expresando a nivel físico, es decir en la vestimenta, en los accesorios, en varias cosas materiales, como ser mismo mi cuarto.
Siempre, toda mi vida, busque algo. Esa búsqueda de ese algo me llevo a pasar por varios estilos, por varias religiones, por varios tipos de música, de lugares, de personas, vestimenta, creencias, gustos o lo que fuere, eran formas de expresarme. Por eso mismo tambalee entre blanco y negro, entre Dios y el diablo, entre polos opuestos y no entendía bien por que, y hasta a veces llegaba a incomodarme. Pero por suerte, ahora me di cuenta cual es realmente mi camino, cual es mi destino, mi misión, la razón de mi existencia.
En todas estas ultimas semanas, sentí que crecí tanto como si hubieran sido años, por que el crecimiento fue espiritual, sale de mi alma donde no hay tiempo, ni espacio. Me siento vibrar en otra frecuencia, siento dentro mío a cada instante un nivel de consciencia superior, estoy encontrando en cada libro y en cada frase reflejos de mi infancia, de mi alma, de mis pensamientos mas profundos y eternos, me estoy dando cuenta por fin que el mundo que vengo soñando hace veinte años existe y es el mio.
Ya no creo mas en la muerte, creo en la transmutación de almas, ya no creo mas en la maldad por que no existe, pero si creo que hay leyes cósmicas, universales que son perfectas y están hechas para que nosotros los humanos pasemos nuestra existencia por el mundo llena de paz y de amor, pero como a veces no sabemos como funcionan estas leyes, o si, pero las quebrantamos nos desarmonizamos con el cosmo, con Dios, o como quiera llamarse y al hacerlo nos pasan cosas malas, es decir formamos mas karma negativo, el cual liquidamos a través de varias reencarnaciones. Tampoco creo en que el planeta esta cada día peor, si no que creo que justamente esta tan mal, por que de todo este caos va a surgir algo hermoso. Como decía Buda, en el pantano se puede encontrar una flor. El mundo también es un ser vivo y esta purificándose por medio de desastres meteorológicos y otro tipo de cosas, esta preparando el terrero para las nuevas frecuencias de vibraciones llamadas “Niños Cristal” quienes van a plantar sobre esta tierra removida, semillas de amor y paz.
Realmente, ahora estoy en paz, conmigo misma, con los demás y con el mundo. Estoy mas allá de la conciencia vulgar y racional que posee el hombre por naturaleza, estoy traspasando umbrales y abriendo dimensiones nuevas, y es algo realmente inexplicable. Y lo mejor, es que todos tenemos estos “poderes” por decirlo de alguna manera, el tema es que los tenemos dormidos o no le damos importancia. Pero eso es parte de la evolución, y cada ser vivo de este planeta, va a terminar entendiendo todo y accediendo a la información y a las experiencias que yo estoy viviendo ahora, entonces recién ahí van a poder comprenderme, comprenderse y comprender al mundo. El mundo que estoy conociendo hoy, se parece muchisimo mas al que yo soñaba desde que era pequeña. Me di cuenta que no sirve de nada desvanecerse en la oscuridad, cuando hay tanta luz, tantos mensajes, tanta energía por crear y tanto misterio por descubrir. Los problemas no existen, simplemente son enseñanzas, pruebas que la vida nos va imponiendo para aprender, son cosas que debemos pagar, y aunque suene a un castigo, no lo son. Las leyes universales son justas, equilibradas y nunca hacen “favores”, aunque también hay formas de “cambiarlas” de alguna manera, pero no voy a hablar de esto ahora. Simplemente, necesitaba expresarme, necesitaba escribir que mi vida cambio, y que siento que es uno de los cambios, si no es el mas, interno y transformador que trascendió en mi en estos veinte años.
En este camino, que recién empiezo en realidad, encontré muchos compañeros de ruta. Algunos duraron días, otros meses, otros años, otros quizá toda la vida y otros, lo se, van a traspasar a otras reencarnaciones conmigo. Igualmente, gracias a todos y cada uno de los que me acompañaron. Todo en esta vida ocurre por algo, como digo siempre, no creo en las casualidades pero si en las causalidades, y si hoy tengo que compartir este regalo con ustedes, por algo es. Les deseo que sean seres llenos de paz, de luz, de amor incondicional, que den sin esperar nada a cambio, que perdonen al prójimo por que todos nos equivocamos, que vivan el presente y que no tengan miedo por que la vida es un regalo hermoso, es una bendición que nos dieron y no podemos desaprovecharla. No se queden en la mediocridad, investiguen, vallan mas allá, sientan la vida en el alma, aprendan y enseñen, por que para eso estamos en el mundo, no para pelear, ni crear violencia, ni sobrevivir....
Por siempre....


N.P.S
02/03/05